Aire fresco para un Racing necesitado de victorias.
RACING BENAVENTE 2.- Josico, Rubén Escudero (Maniega), Gago, Vini (Meri), Víctor, Jesús, Modes, Piatti (Bassin), Pablo Voces, Héctor y Chino.
C.D ARROYO 1.- Jaime, Iván, Muci (Cascón), Franco, Pellejo, José, Dani, Espejo (Manso), Diego (Javier), Andrés y Nico.
Árbitro.- Sánchez Díaz, auxiliado por Beneitez Rodríguez y Sánchez García. Amonestaron a los locales Chino, Gago, y Víctor y a los visitantes Javier y Franco, éste en dos ocasiones por lo que fue expulsado en el minuto 83.
Goles.- 1-0.- Piatti (53´), 1-1.- Franco (65´), 2-1.- Jesús (67´).
El partido no fue para nada bueno, pero al final de lo que se trata es de sumar y el Racing lo hizo con tres puntos ante uno de los buenos equipos de la categoría, demostrando que la línea que está pisando en los últimos partidos es más acorde con lo que su parroquia, muy distante de lo que se ha visto hasta no hace mucho.
Un Racing, que ojito, ya sale desde inicio a la cancha sin dejarse sorprender a las primeras de cambio con goles que a la postre casi remataban el partido.
Jorge Bruña y Carlos Sánchez parecen haber dado con la tecla correcta para dominar a una plantilla, más pendiente de hacer la guerra por su cuenta que de cumplir con las indicaciones que desde vestuario y desde el banquillo se les facilitaba.
La tarea de buscar los puntos suficientes para librar el descenso, el Racing sigue siendo último de la tabla a pesar de esta importante victoria ante el C.D Arroyo, no va a ser sencilla y los jugadores albicelestes deberán de dar todo lo que tienen encima para hacerse fuertes en todos los campos. Por este motivo la visita del C.D Arroyo no era nada cómoda para los benaventanos, más teniendo en cuenta que el cuadro de Arroyo de la Encomienda es uno de esos equipos que tratan bien la pelota y no pierden la cara al partido durante los 90 minutos.
Pero el partido tuvo un incondicional que pudo ser clave para la victoria de unos y la derrota de otros, el viento. Sopló con fuerza durante todo el choque y a duras penas los jugadores más elaboradores pudieron hacer gala de la construcción del juego que pudiera espolear a sus colores. En este intercambio de golpes fueron los benaventanos quienes salieron vencedores.
Una primera mitad en la que el Racing salió mandando en el juego y que llegaba con bastante facilidad al marco contrario con algunas ocasiones de desequilibrar la balanza que no se materializarían, principalmente la de Modes o la de Jesús, la primera con intervención providencial del meta vallisoletano y la segunda por entretenerse. Luego fue el C.D Arroyo el que tomó la batuta del juego haciendo sudar tinta al meta local Josico con algunas paradas de mérito y con el poste como aliado tras un disparo de Nico. Pero lo cierto es que el Arroyo se mostró muy fallón y ello permitió seguir soñando a los locales.
La segunda mitad hacía presagiar aquello de que quien consiguiera hacer gol se llevaría la victoria y así a los ocho minutos de la reanudación Piatti encontró hueco entre los tres palos para adelantar a los racinguistas. Ahora era cuestión de creer y de no descuidarse para obligar al Arroyo a buscar el empate y sorprender en alguna de las contras. Pero llegaba el empate en un balón que Franco se encontraba perdido y de nuevo al trabajo.
La fortuna que otras veces no encuentra el equipo de Jorge Bruña la halló esta vez porque además fue a buscarla y así es más fácil dar con ella. La encontraba Jesús, que de nuevo volvía a mojar, con un gol que se herejía como “muy importante”, poco después del empate, y que había que defender a capa y espada. Un gol que hundió al cuadro visitante que ya no fue capaz de poner orden en sus filas y que además jugaron en inferioridad durante más de siete minutos por la expulsión del autor del gol del empate Franco.
La tarea este fin de semana vuelve a ser complicada en la visita que habrá que hacer al campo del C.D Ciudad Rodrigo el domingo a las 17,00 horas en el Alonso Mateos si la nieve no lo impide para entonces.
