Albense se aprovecha de una mala salida a pista del Desguaces Casquero
ALBENSE F.S 6.- Miguel, Cristian, Javier, Tanar y Jaime. Luego jugaron, Óscar, Diego, Álvaro, Pablo, Roberto, Alejandro y Borja.
DESGUACES CASQUERO 1.- Mañanes, Álex Escudero, Samu, Joselu y Javi Cala. Luego jugaron, Malaguti, Charlie, Josico, Álex y Arafa.
Árbitros.- Sanz Moreno y Gregorio Rodríguez. Amonestaron a los locales Tanar, Cristian y Diego y a los visitantes Álex Escudero, Álex, Mañanes y Josico. Expulsaban por doble amarilla al local Jaime y a los benaventanos Malaguti y Joselu.
Goles.- 1-0 Jaime (7´), 2-0 Jaime (15´), 3-0 Cristian (34´), 4-0 Jaime (36´), 5-0 Oscar (37´), 5-1 Charlie (37´), 6-1 Oscar (38´).
Una mala salida del equipo de Bertolín puso en bandeja un partido de esos que gustan jugar a los jugadores por enfrentarse a rivales amigos y de los que están arriba en la tabla. Aunque claro, tras el pitido inicial las amistades de apartan y surge la vena competitiva en la que los charros del Albense ganaron la partida a los benaventanos.
A veces las derrotas de este tipo no son más que un bálsamo reconfortante para asumir que nadie regala nada y que nadie es superior a nadie por muy líder que se fuera en la tabla. Los partidos hay que jugarlos exactamente igual contra grandes que contra pequeños y el resultado lo sentencia un marcador, que normalmente es justo con el equipo que ha sido merecedor de la victoria.
Ya lo decía el técnico benaventano la pasada semana después del partido ante el Unión Arroyo tras lo visto en la segunda mitad y no ha habido casi ni tiempo a reaccionar cuando llega la primera derrota y además de la forma en la que esta se dio. Bien es cierto que el marcador fue demasiado abultado debido a que los benaventanos que había visto un pequeño resquicio de luz en unos momentos lúcidos de la segunda parte y se fueron a buscar el partido o al menos agarrar algún punto. Lo que tiene este deporte es que cuando arriesgas tienes la posibilidad de dejarlo todo en el camino, pero no menos cierto es que quien no arriesga no gana.
La primera parte es de esas que a cualquier técnico no le gusta recordar y más cuando le permites al rival optar a muchas cosas más por los errores propios que por sus méritos. Nada salía y ante un rival fuerte y que sabe lo que hace como el Albense estás perdido. Un dos a cero al descanso y sin visos de solución a tenor de las muchas ocasiones de las que dispusieron los visitantes y ante un cuadro chatarrero que había perdido a un jugador importante como Malaguti por doble amarilla casi de forma continuada.
La “Bertolina” del descanso sirvió para que apareciera un nuevo equipo en pista adueñándose de la pelota y el juego durante los diez primeros minutos, pero la escasa puntería, las actuaciones del meta Borja no hacían bueno ese dominio en el marcador. Los charros ya llegaban de forma aislada al marco de Mañanes, pero una contra a cinco para el final colocaba el tercero de los locales.
Había que nadar y guardar la ropa, pero la distancia cada vez era mayor y la ropa cada vez estaba más lejana con lo que en ese intercambio de golpes, esta vez no se salía vencedor y el marcador se iba hasta el definitivo 6-1.
Será semana para aprender la lección de Alba de Tormes y tomar nota de la importancia que merece el estar tensionados desde el minuto uno hasta el pitido final.
José Bertolín (Entrenador del Desguaces Casquero).- «Partido en el que no salimos acertados a la pista, y nos pasó factura una mala primera parte muy poco intensa por nuestra parte, pases malos, llegando tarde a la presión y con pocos recursos con el balón. Nos fuimos 2-0 al descanso y gracias, ya que fallaron un doble y jugamos una inferioridad. Demasiado vivos para lo que hicimos con un muy superior el rival. Tras la charla del descanso cambiamos el chip y recuperamos la intensidad. Los primeros diez minutos fueron nuestros con alguna ocasión aislada de los locales, pero la pelota no quiso entrar, y conforme fue pasando el tiempo fuimos más a la desesperada, hasta que a falta de 5 min para el final el Albense nos pilló en una contra haciendo un dos para el portero poniendo el 3-0. Lo intentamos de portero jugador y tras un error llegó el cuarto, y ya a remolque, hasta el 6-1 final. Merecida derrota ya que el rival fue superior aunque con demasiado castigo en el marcador, ya que estuvimos hasta el 35′ 2-0 y peleando el partido».