Cuando Paloma Yraola Sánchez de la Bodega descubrió el valor histórico de los documentos que su familia había custodiado por generaciones, no dudó en donarlos a la ciudad para el disfrute de todos los benaventanos.
Cuando Paloma Yraola Sánchez de la Bodega descubrió el valor histórico de los documentos que su familia había custodiado por generaciones, no dudó en donarlos a la ciudad para el disfrute de todos los benaventanos.