Millar y medio de águedas ataviadas con vistosos y coloridos trajes tradicionales desfilaron por las céntricas calles benaventanas entre cánticos y bailes. Una misa en Santa María del Azogue y una comida de convivencia completaron el día.
Millar y medio de águedas ataviadas con vistosos y coloridos trajes tradicionales desfilaron por las céntricas calles benaventanas entre cánticos y bailes. Una misa en Santa María del Azogue y una comida de convivencia completaron el día.