Manu operado con éxito en la mañana de hoy de su fractura de tibia y peroné.
Amigo Manu:
Quien me iba a decir que hoy estaría dedicándote este momento después de los diferentes modos de pensar que mantuvimos durante muchos momentos de la pasada temporada?. Unos momentos que al final, creo, han llegado a juntarnos en el mismo camino y donde hemos aprendido que la amistad al final está por encima del resto.
Han pasado aquellos momentos en los que la famosa “gallina” con la que me ibais a dedicar algunos de los goles de la temporada pasada, a los abrazos y algunos buenos ratos, pocos pero buenos, en los que hablamos del punto del camino en el que nos encontramos, el C.D Benavente.
Te has convertido, y lo sabes bribón, en un jugador casi imprescindible en el club tomatero. Nadie puede negarte que te dejas el alma cada domingo en el campo, a veces más de la cuenta y que han impedido que acabes los partidos con tus compañeros. Pero eres ese jugador que suda la camiseta, que la siente, que lo pasa mal cuando el equipo pierde, que no quieres ni por asomo oir hablar de la provincial, en definitiva un ejemplo como otros compañeros que lo saben.
El domingo por desgracia la mala suerte se cebó contigo, con tu equipo, con mi equipo. El minuto 87 quiso formar parte importante de tu vida y una acción desafortunada nos impedirá volverte a ver comandar la defensa del Benavente en lo que resta de temporada, lucir ese cuatro que llevas para bien y para mal. Ese cuatro que mantuvo la portería de Marco a cero y ese cuatro del que no te desprendiste ni cuando ibas en ambulancia camino de León. Es tuyo y nadie te lo va a quitar, aunque el domingo en Navas del Rey sea otro compañero el que lo lleve. Ojalá tú, aunque no físicamente, puedas estar dentro!, y jugar ese partido y el resto desde tu recuperación. La verdad es que nos harías sentir más seguros.
Sé que tu operación ha resultado un éxito al menos las referencias que amigos comunes me han hecho llegar y que por lo tanto hoy es el primer día de tu particular pretemporada. Con tu afición, carisma, ilusión y demás adjetivos que harían esto inagotable volverás pronto y lo harás en la Regional de Aficionados, porque no te quepa duda que tus compañeros se van a seguir vaciando para que el Benavente saque la cabeza del lugar que no merece.
¡Campeón eres grande!, como jugador y como persona. Has defendido los colores tomateros sin importarte lo que te podría pasar y que al día siguiente tenías que trabajar, porque del fútbol aquí no se come. Me producen carcajadas el ver como grandes estrellas de nuestro fútbol español se quejan, se atacan y hasta patalean. Me gustaría verlos en tú pellejo, ellos que cobran, casi nada, que cuando termina el partido ni se acuerdan la camiseta que han llevado y que pase lo que pase van a tener bastante más que para un cocido o cena con la mujer o novia. La tuya Manu, tendrá que esperar al menos hasta la temporada que viene, pero no dudes amigo que ese cuatro volverá a estar a tu espalda.
Por cierto, alguna lagrimita sí que se me ha caído de rabia pero sobre todo de la entereza con la que te lo tomaste. Me quedo con una frase tuya cuando te subían a la ambulancia y que cruzaste con tu presidente Domingo Corral, ¿Pero ganamos no?. Sí Manu ganamos, te perdimos a ti, pero volverás a ganar. ¡Animo y hablamos!