UPYD PRESENTA UNA PROPUESTA DE ORDENACIÓN TERRITORIAL
Castilla y León: 77 municipios y un ahorro de casi 310 millones de euros al año
- UPyD en Castilla y León presenta su Propuesta de Ordenación Territorial con la fusión de municipios como pilar básico
- Las Diputaciones Provinciales y las Mancomunidades desaparecerían; el número de ediles pasaría de 13.219 a sólo 1.365
Una planta municipal con 77 municipios y 309,87 millones de euros de ahorro anual son las principales novedades que Unión Progreso y Democracia en Castilla y León ha presentado ayer en su Propuesta de Ordenación para el Territorio de Castilla y León, en la rueda de presa que tuvo lugar en la sede de la formación magenta en Valladolid, y a la que asistieron el responsable territorial de Acción Institucional, José Miguel Mateos, y el coordinador local de Valladolid, Rafael Delgado Botello. El coordinador territorial, Félix Sánchez Montesinos, no pudo asistir por motivos labores.
La propuesta de la formación magenta parte de la necesidad de fusionar municipios para hacer frente al micromunicipalismo que afecta a la región: de los 2.248 Ayuntamientos que existen en la Comunidad Autónoma, más de la mitad son menores de 500 habitantes y por su pequeño tamaño no pueden aplicar economías de escala ni hacer frente a sus obligaciones para con los ciudadanos, lo que las hace depender de otras entidades como Diputaciones Provinciales y Mancomunidades.
Con municipios de mayor tamaño, competencias y financiación las instituciones intermedias – mancomunidades, Diputaciones o consorcios – dejarían de ser necesarias, por lo que su coste estructural – el derivado de su propia existencia reflejado en los capítulos 1 y 2 de sus presupuestos – se podría reinvertir en los nuevos Ayuntamientos. La aplicación de este modelo produciría un ahorro de 309,87 millones de euros al año. Cabe destacar que esta cantidad se ha calculado con criterios extremadamente prudentes, ya que no se han tenido en cuenta costes como por ejemplo los sueldos y dietas de los Diputados Provinciales, su personal de confianza o asignación a grupos políticos. La clarificación de competencias y una administración menos elefantiásica permitirían acercar las instituciones a los ciudadanos y evitar de ese modo prácticas clientelares y corruptas.
De cara a elaborar esta propuesta, se han tenido en cuenta las Áreas Básicas de Salud, los centros escolares, las infraestructuras y la realidad cultural y socioeconómica de los municipios fusionados. El tamaño medio de los municipios alcanza los 33.143,25 habitantes, siendo la capital vallisoletana el mayor de ellos (399.078 habitantes) y el menor el municipio soriano de San Pedro Manrique, que aglutinaría a 34 pueblos y que sólo contaría con 4.015 habitantes.
Esta reducción de los municipios también repercutiría en el número de concejales sin afectar al pluralismo político tal como propone le Gobierno central al querer reducir arbitrariamente el 30% de los ediles. Como consecuencia, se pasarían de 13.219 concejales a 1.365, casi un 90% menos. Asimismo, los funcionarios se reasignarían entre los nuevos Ayuntamientos y la Junta de Castilla y León, y el resto de trabajadores públicos formaría parte de las nuevas entidades atendiendo a criterios de eficiencia y eficacia.
El responsable territorial de Acción Institucional, José Miguel Mateos, destacó que el principal objetivo de este modelo “es asegurar los servicios básicos” y lamentó el desinterés del Gobierno regional por abordar la reestructuración del territorio. “La Junta de Castilla y León ha hecho en estos 30 años varios estudios sobre la Ordenación Territorial – explica – conocen el diagnóstico y no fusionan municipios por su elevado coste político”. Asimismo, Mateos recordó que este proyecto intenta abrir nuevas vías de debate y que está abierto a cambios y mejoras, “aunque se mantienen los principios de una fusión de municipios adecuada al siglo XXI y la eliminación de instituciones intermedias como Diputaciones, Mancomunidades y Consorcios, así como el respeto a la pluralidad política”.